No sé qué hacer, qué sentir. Son tantas cosas a la vez.
  Me siento decepcionada. De vos, de lo que alguna vez quise, porque vos no eras así, cambiaste y para mal. Te convertiste en todo lo que siempre odié. 
  Vacía, estuve queriendo por años algo que no existió nunca, algo ficticio, algo que me hacía bien, que era lo único que me hacía seguir, estuve tanto tiempo engañada. 
  Me siento sin emoción alguna, no lo asimilo, le doy vueltas al tema pero sigo sin caer, lo único que sé es que no quiero seguirte más. 
  Hace mucho tiempo empecé a darme cuenta de cómo eras, pero lo dejé pasar porque te quería, dejando incluso que lo hagas conmigo, que podría seguir estando ahí si te tenía acá.
  Antes de quererte dudé tanto en darte la oportunidad, porque ya me habían hecho mal, ya sabía lo que era, porque algo me decía que ibas a ser exactamente igual. Y no me equivoqué, sos peor. 
  Y jamás pensé que las cosas iban a ser así, porque a pesar de que me esperara lo peor por tu parte para dejarte ir, nunca se me pasó por la cabeza el alejarme tan repentinamente, con tanta decepción. 
  Siento enojo, no conmigo, yo sólo te quise, vos no lo tomaste en cuenta. Pero dolió, porque eras todo lo que a mí me hubiera gustado ser. Todo lo que quise por un momento, por muchos momentos, incluso por lo que llegué a llorar, que podría seguir haciéndolo si nada hubiera cambiado, si hubieras sido el mismo desde un principio. Y las personas cambian, pero es una decepción enorme el saber que para mal.