El dÃa que me enamoré de él no se encuentra tan lejano. Era uno de ésos dÃas para mÃ, en los que me sentÃa tranquila después de tanto tiempo castigándome por evadir realizar cosas que claramente no querÃa. Pero cuando lo miré, y cuando me miró, lo vi. Entonces el resto del dÃa me la pasé pensando en él y en sus ojos marrones, su piel pálida, su pelo para cualquier lugar. No lo querÃa mirar, porque me daba vergüenza, pero lo hacÃa a cada rato y por supuesto que se daba cuenta. Y cada vez que nos mirábamos yo sabÃa que ya se habÃa dado cuenta. Pero su juego no era perverso, con propósito, parecÃa hasta inocente. Yo creo que fue inocente. Algo asà como de momento, porque jamás nos Ãbamos a volver a ver.
Entonces, cuando lo vi por primera vez, me relajé; fue algo instantáneo. Y si bien siquiera estuvimos tanto tiempo juntos, lo sentà real. Desconocidamente verdadero. Digo, quién no se "enamoró" en la calle alguna vez. Pero lo cierto es que en algún momento nos Ãbamos a ir, pero siquiera me paré a pensarlo en el momento, porque parecÃa infinito. Y tampoco me di cuenta cuando me fui y él también se fue. En mi mente seguÃa siendo todo para siempre: nos vamos a volver a ver, otra vez.
Cuando caà en lo que habÃa sucedido, habÃan transcurrido dÃas. Nada, pensé, a veces te das cuenta después de años. Y yo sé que no fue nada, porque acá estoy tratando de escribirle poesÃa a alguien que claramente no conozco ni jamás lo haré, pero sé que fue prueba de que cualquier dÃa me voy a poder soltar de vos y de mis propios sentimientos. Enmascararte en otra persona sirvió por un momento, porque por un momento me sentà libre de mà misma otra vez. De esa que todavÃa no puede despegarse de vos. De esa que quizás nunca pueda, porque soy yo, pero a la cual le tengo que ir destejiendo años de quererte, para hacerles afrontar una realidad que sigue siendo utópica. Pero después de todo, creo que quererte también lo es. Sé que te estoy olvidando de a poquito, como cuando pasan años y tu memoria se va llenando de nuevos recuerdos. Y no olvido de superación, sino de nostalgia. Sé que me estoy olvidando, porque a veces no me acuerdo de vos. Ya sea porque esté ocupada o porque no me pases por la mente. En cambio, otros dÃas te escondés entre las cosas más rutinarias y en las que nada tenés que ver, sólo para preguntarme si de alguna manera puedo hacer que también formes parte de esto. Te veo detrás de cosas totalmente desvinculables y me gustarÃa no incluirte en cada pasito de mi vida. Pero no podrÃa impedÃrtelo, desde acá y viendo hacia el futuro, siempre voy a necesitar que estés en todo y asà sentir que nunca te perdÃ.
Entonces, cuando lo vi por primera vez, me relajé; fue algo instantáneo. Y si bien siquiera estuvimos tanto tiempo juntos, lo sentà real. Desconocidamente verdadero. Digo, quién no se "enamoró" en la calle alguna vez. Pero lo cierto es que en algún momento nos Ãbamos a ir, pero siquiera me paré a pensarlo en el momento, porque parecÃa infinito. Y tampoco me di cuenta cuando me fui y él también se fue. En mi mente seguÃa siendo todo para siempre: nos vamos a volver a ver, otra vez.
Cuando caà en lo que habÃa sucedido, habÃan transcurrido dÃas. Nada, pensé, a veces te das cuenta después de años. Y yo sé que no fue nada, porque acá estoy tratando de escribirle poesÃa a alguien que claramente no conozco ni jamás lo haré, pero sé que fue prueba de que cualquier dÃa me voy a poder soltar de vos y de mis propios sentimientos. Enmascararte en otra persona sirvió por un momento, porque por un momento me sentà libre de mà misma otra vez. De esa que todavÃa no puede despegarse de vos. De esa que quizás nunca pueda, porque soy yo, pero a la cual le tengo que ir destejiendo años de quererte, para hacerles afrontar una realidad que sigue siendo utópica. Pero después de todo, creo que quererte también lo es. Sé que te estoy olvidando de a poquito, como cuando pasan años y tu memoria se va llenando de nuevos recuerdos. Y no olvido de superación, sino de nostalgia. Sé que me estoy olvidando, porque a veces no me acuerdo de vos. Ya sea porque esté ocupada o porque no me pases por la mente. En cambio, otros dÃas te escondés entre las cosas más rutinarias y en las que nada tenés que ver, sólo para preguntarme si de alguna manera puedo hacer que también formes parte de esto. Te veo detrás de cosas totalmente desvinculables y me gustarÃa no incluirte en cada pasito de mi vida. Pero no podrÃa impedÃrtelo, desde acá y viendo hacia el futuro, siempre voy a necesitar que estés en todo y asà sentir que nunca te perdÃ.