by - julio 22, 2019

  Y creo que lo más triste de todo esto es darme cuenta de que te sigo buscando en todos lados. Y ser incapaz de encontrarte. Porque en cada persona que miro a los ojos, te veo, sólo para darme cuenta segundos después de que te desvaneciste -otra vez- y quien está en frente mío nada tiene que ver con vos. Y creo que lo más triste de todo esto es seguir buscándote inconscientemente, cuando esto ya es costumbre y ya es rutina, donde no me veo de otra manera. Y donde siento que no te puedo ver de otra manera. Siento no poder verte de otra manera, te juro que intento no expresarte como todo, pero finalmente lo terminás siendo.
  Sé que todo esto está en un lugar que ya perdió sentido. Yo ya no me acuerdo de vos, sino de mí, queriéndote. Donde yo siempre te quiero, pero vos no me querés a mí. Y estar acá suena a un otra vez constante, que nunca termina, y que si lo hiciese, comenzaría nuevamente. Entonces me siento encerrada en vos, no desde un lugar del que no querría salir, sino desde uno en el que me siento incapaz de poder hacer algo.
  Sé que no puedo pararlo, y todos los días me encargué de preguntarme por qué. Por qué si fui capaz de tantas cosas, justo con vos no puedo. Y me di cuenta de que no tiene que ver con que seas vos, sino porque es por mí. Te juro que hay algo más doloroso que sentir todo esto por vos, y es no ser capaz de sentir absolutamente nada. Ver que la vida está pasando y permanecés como en un stand by, donde ves que todo transcurre pero vos estás completamente quieta en el mismo lugar. Y sé que la forma en la que resolví algunas cosas en el pasado no fue la mejor, y recién puedo verlo ahora. En ningún momento se me hubiese ocurrido sentirlo, porque en ése momento hubiese pensado que mientras menos me costara, mejor. Ahora, desde acá, completamente miserable, no desde un punto en el que toda mi vida es horrible y todo sale mal, sino desde uno en el que, no sé, en el que no sé cómo decírtelo ya, sé que sentir todo esto es preferible a no poder sentir nada y quedarme completamente inmutada.
  Y creo que lo más triste de todo esto es darme cuenta de que te sigo buscando en todos lados, no importa qué esté haciendo, no importa a dónde vaya, qué música escuche, qué serie mire, de quién me intente enamorar. En este momento sólo resuena tu nombre por cualquier lugar, sólo para darme cuenta de que el tiempo es relativamente un instante redundante, que siempre comienza en ese día, que siempre comienza en el mismo lugar, ése donde solías estar, pero donde soy incapaz de volverte a encontrar.

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