• Home
  • About
  • Contact
    • Category
    • Category
    • Category
  • Shop
  • Advertise

About Me

About Me
Escribo desde los 13 años, me gustan las series, los gatos y Marina and The Diamonds. , click here →

Follow me @paula.sidoruk

Followers

>>Otros blogs

  • Cafeinómana
  • ( brillantina explosiva )
  • Silicon, Saline, Poison
  • Vuelo de media luna.

Translate

facebook twitter instagram pinterest bloglovin Email

Happy crime.

"I am Marina and you are the Diamonds."

  Todo el día estuve pensando en si escribir o no, me cuestionaba si estaba en lo correcto, o, por el contrario, debería no hacer nada. Pero la respuesta es tan fácil como la promesa, dije que no iba a prohibirme nunca más hacer esto. Entonces, aunque quizás lo repita y me canse de pensarlo, no lo voy a dejar de hacer. 
  No voy a dejar de dibujarte en letras, porque siempre lo puedo hacer de una manera distinta. Y si puedo, y si me sale, y si me ayuda a aclarar aspectos confusos de lo que fuiste, ¿por qué no lo voy a hacer? 
  Entonces, una vez llegada la respuesta, la próxima acción a analizar, sería: ¿sobre qué escribo? Obviamente de mí, de vos, del medio y de lo que ya no es. También de lo que queda y no me gusta, de lo que alguna vez no fue. 
  Pero no pienso en absolutamente nada. Intento, pero no recuerdo, las frases no se arman y mis dedos no se mueven. Pienso, pienso en vos, pienso en mí, pienso en todo. Pero no hay nada, ni en el medio, ni atrás, ni adelante. Nada de nada. Sigo pensando, ¿qué me pasaba? Con vos y conmigo. Justamente en este momento no lo puedo ni asimilar, no logro entenderlo en absoluto. 
  Trato de repasar todos esos recuerdos que inútilmente chocan en mi cabeza repetidamente, ellos dicen que se quieren quedar para siempre y yo ya no quiero recordarlos nunca más. Ni a ellos ni a vos. Ahí tenés. Rencor, bronca, repulsión. Todos sentimientos dañinos, que no se separan casi nada de lo que vos eras. 
  No siento nada respecto a eso. No molestan, su presencia pesa pero me hace entender que estuve equivocada y esa es razón suficiente para mí. 
  Cruel suena de mi parte confesar que tu presencia me molesta, pero es así. Contrariamente a lo que había atrás, no quiero nada de tu parte. Ni mirada, ni sonrisa, ni saludo. Nada que me recuerde que en algún momento te quise con lo que era, nada que me haga sentir eso de nuevo. Porque no va a pasar, pero no quiero repetir el medio que no fue nunca y mucho menos las ganas de querer de alguien que ya no está. Yo ya no estoy ahí y sé que vos nunca lo estuviste.
  Juego, manía y manipulación, hoy son parte de todo eso que el atrás se llevó. Y que regresa de vez en cuando. Al oscurecer, en ciertos lugares, en extenuantes momentos.
  Entonces, no. Suficiente dejé como para volver a regalar eso que no entendiste, que no quisiste aceptar. Entonces no, no intentes ser tan hosco, cambiá tu rótulo, y volvé a empezar; porque eso me suena más sincero que divagar por lo que ya no es más.
Share
Tweet
Pin
Share
No comentarios
Y de repente te paseás por mi mente. Me pongo nerviosa, sonrío. Es como si estuvieras en frente mío y yo no pudiera hacer nada más que estremecerme. 
  Ya hace tiempo que no podía creer en nada. No te voy a mentir, quise y con el alma. Dejé de creer por mucho tiempo en eso que decían era querer, y de repente apareció otra persona que me enseñó que yo podía. Pero pasó similar, quise y de verdad. Pero volví a entumecerme, dudaba. Dudaba de que pudiera querer como la primera vez. 
  Ahí apareciste vos. Justo en el momento que dije con absoluta seguridad que quizás no estaba tan equivocada, que por ahí nunca iba a volver a querer así. De más está decir que me desconfiguraste el control sobre mí misma y que eso me encanta demasiado. No hace falta aclarar, tampoco, que me hacés bien, aunque no lo sepas. Cada vez que me mirás no puedo evitar sentirme bien y correr la mirada, porque me da pena que me veas. Pero también me encanta que te des cuenta. 
  No voy a hablar sobre finales tristes ni complicaciones que ya existen, sólo voy a decir que ya me enseñaste que puedo, y que puedo siempre. Lo demás, para mí, ya no importa tanto. Sentir está bien y no importa quién esté del otro lado, menos si estás vos.
Share
Tweet
Pin
Share
No comentarios
  Sos más.
Sos la carcajada desprevenida, sos las ganas de llorar que te dan en cualquier lugar. 
  Sos la cabeza apoyada en la ventana del colectivo, sos el que mira el paisaje mientras escucha música.
  Sos el que mira con tristeza la lluvia, sos el que canta mal y el que lo hace una y otra vez.
  Sos el que intenta no pisar las líneas en el piso y el que salta los charquitos. 
  Sos el que pisa fuerte y se salpica, sos el que se queda mirando cualquier cosa mientras caminás.
  Sos el que se golpea la cabeza contra la pared, el que cree en cualquier cosa, el que dice otras tantas, el que se calla muchas más.
  Sos el que se imagina eso que no fue e inventa lo que podría haber sido. 
  Sos el que mira la sombra en el piso mientras caminás, el que siempre llega tarde a todos lados.
  Sos tus manías extrañas, sos eso que no querés contar.
  Sos esa mirada fugaz que hacés cuando mirás a quien querés, sos esa sonrisa tonta.
  Sos las veces que te llenás los ojos con lágrimas y preferís guardarlas antes que soltarlas.
  Sos el alma rota cuando ves a quien te rompió, sos las ganas de estar triste.
  Sos los chasquidos que hacés con los dedos cuando te aburrís, cuando estás nervioso, cuando no sabés qué hacer.
  Sos las canciones que cantás en tu mente, sos los gestos que hacés cuando pensás en algo que pasó.
  Sos los colores que te encantan y los que te parecen feos, sos las subiditas en las calles y los puentes que te dan miedo descender.
  Sos el que gusta del olor de la mañana y del atardecer, sos el que pasa por una plaza y se empieza a hamacar. Sos el que cierra los ojos y se despega del mundo por un ratito mientras vuela.
  Sos el que pierde el colectivo siempre, el que camina y observa todo, el que se para a acariciar a los animales.
  Sos el que no tiene buena suerte y el que es pesimista.
  Sos las veces que llorás en tu cama a la noche y sos las veces que te dormís triste.
  Sos el que se queda mirando un punto fijo en la pared mientras piensa.
  Sos el que se queda mirando a la persona que quiere y sonríe con ganas, con amor, con ojalá que seas para siempre.
  Sos el que sonríe al recordar algo, el que llora cuando añora lo que ya no es más. 
  Sos el que dedica canciones sin decir, sos el que busca letras para intentar descubrir cómo se siente.
  Sos más, pero no sé qué más sos. 
Share
Tweet
Pin
Share
No comentarios
  Tanta confusión, tan idealizado, tan desmerecido. Tanto perdón, tan una vez más, cuántos "me equivoqué" que tengo que confesar.
  Tantos te quiero así y cuánta incapacidad para darme cuenta de que era en vano.
  Tanto vacío y cuánto uso que me diste, tanta ilusión absurdamente primera.
  Cuánta mentira derrochada, tantos te creo porque no quiero creer en nadie más. Tantos engaños instantáneos y cuántos te creo porque sos vos.
  ¡Tanto tiempo perdido y cuánto idealizado! Increíble tu manipulación y tardía mi caída.
   Tan auténtica parecía ser tu persona y cuán equivocada estaba mi percepción. Cuánto amor que deposité en vos y cuánta decepción supiste devolverme.
  Tan sincero parecía tu mirar y cuán equivocada preferí estar. Tanto dolor sin medidor y cuán poco te importó siempre.
  Tantos te conozco y cuántos pocos de verdad. Cuántas lágrimas innecesarias produciste y tanto amor idealizado preferiste deshilachar.
  Cuánta mentira disfrazada sabías mostrar y cuántas ganas de creerte elegí antes que dudar. Tanto olvido que te daba y cuántos ojalá en el medio de la nada.
  ¡Tanto tiempo caído y cuánto malgastado! Despreciable tu mentira e inocente mi mirar, sabias tus manías y tonto mi quedar.
Share
Tweet
Pin
Share
No comentarios
  Ya pasó hace años, pero me acuerdo de ese día.
  Era feriado, y había sol. Tenía miedo, tenía nervios. Vos ibas a venir a verme y eso me traía bastante mal. Había esperado que llegara ese momento, porque me causaba ansiedad verte. 
  Un miércoles me habías dicho que te gustaba, que te encantaba. Y yo quedé muda, tildada. De repente se me mezclaron sensaciones, recuerdos, todo junto. Y sentí que la amistad se había roto para siempre. Ya nada iba a volver a ser igual, y lo sabíamos bien. 
  De repente me hice creer que yo sentía eso mismo que vos sentías por mí. Y me confundí, y lo negué hasta cansarme, porque sabía que no era verdad. Pero igual nos vimos dos días después, un viernes. 
  Llegaste y me saludaste, con un beso en el cachete. Me estremecí. Caminamos hasta mi casa, no me acuerdo si hablábamos en el camino pero sí me acuerdo de que traías un pañuelo re lindo y que no podía dejar de mirarte de reojo mientras intentaba imaginar qué iba a pasar. 
  Llegamos, y tengo un claro recuerdo en la cocina, yo preparando mate y vos sonriendo todo el tiempo. Más nervios, no entendía nada. Estaba bastante incómoda y sabía que vos también lo estabas. 
  Fuimos a mi pieza y nos sentamos en la cama, en algún momento teníamos que tocar ese tema. Pero sólo nos mirábamos. Y sonreíamos todo el tiempo. 
  En vez de hablar nos pusimos a ver películas de terror. Habremos mirado una, o dos. Una no la completamos, y esa era la más linda. 
  En un momento nos quedamos mirando fijo, y no había palabra que valiera ni sonrisa que frenara lo que iba a pasar. "Qué lindas pestañas tenés", dijiste. Hice ese pestañeo característico que hago cada vez que me comentan lo mismo. "No, están re quemadas por el rímmel", contesté. Silencio. Seguíamos mirándonos. No sé cuántos segundos fueron, ni cuántas veces pasó lo mismo. Pero siempre fui yo, no quería tirar a la basura tantos lindos recuerdos que teníamos hasta ese momento. 
  Y te esquivé la mirada, o me levanté de golpe de la cama, entre otras cosas. En un momento nos abrazamos y esa fue razón suficiente para darme cuenta de que no tenía por qué cambiar nada, pero igual iba a pasar y no podíamos evitarlo. Y te abracé fuerte, te abracé con ganas y con la esperanza de que nunca se terminara esa relación rara que teníamos. Nunca me habían abrazado con tanto sentimiento y esos abrazos no los encontré nunca en nadie más. 
  Y nunca tocamos el tema, porque simplemente me dijiste que si no sentía lo mismo que vos, sólo siguiéramos como si nada hubiera pasado. 
  Después de años me sigo acordando de ese día porque a veces venís tan de golpe que me imagino que retomarías nuestro casi primer beso, evitado, inoportuno, y nunca destinado a suceder.
Share
Tweet
Pin
Share
No comentarios
  Cualquiera que me conociera de verdad pensaría que raramente te recuerdo y que tu paso por mi vida ya no significa nada. A veces me gusta pensar que es así, otras tantas me doy cuenta de que no, todavía no. 
  Miro alrededor de donde sea que esté ahora, y de repente todo te recuerda. Intento acostumbrarme, pasa más seguido últimamente. 
  Afuera llueve, hay nostalgia gris, y me acuerdo de que te daban miedo los truenos, como si desconocieras que no hacen nada. Pero estruendan de golpe y yo también me hago chiquita, me tapo con la frazada y espero a que pase. Cada vez que escucho uno me acuerdo de vos, y andá a saber si vos también de mí.
  Afuera sigue lloviendo, y a vos hasta hace unos años te encantaba, pero a mí no me gusta porque hace que te recuerde todo el tiempo. Entristezco cuando escucho la primer gota desde la cama, y sé que desde la tuya vos estás feliz de que llueva una vez más. 
  Ahora mismo afuera está lloviendo, por inercia voy hacia el balcón y observo el paisaje gris, los árboles tristes y las luces apagadas. No hay sol pero las nubes están todas juntas como si tuvieran frío. Entro, mis 22 gatos están durmiendo entre el sillón y los respaldos, juntos, como si el día sólo sirviera para eso. Sonrío. Parece tonta la comparación entre nubes y gatos, pero a mí no me parece tan desmesurada.
  Los pensamientos se profundizan, y pienso en cada cosa que sé, o sabía, sobre vos. Te caracterizo con la lluvia e imagino que debés estar encantada de que caiga agua y durante todo el día no hagas nada. 
  Cuando me quiero dar cuenta ya no está lloviendo, recién escuché a unos pájaros cantar. No sé cuánto tiempo habrá pasado pero creo que me saqué de adentro una buena dósis de tristeza tuya. 
  Pero de por sí todo lo que está afuera de mí te recuerda como si no existiese nada más, y aunque intento pensar en otra cosa, estás en todos lados. 
  Suena una canción, más tuya que mía, porque te la dediqué hace un poco más de dos años. Suena otra, que también es tuya. Y otra, pero esa no la conocía en ese momento así que paso a la que sigue. 
  Volvió a llover, desde adentro me dicen que se parece bastante a cómo estoy desde hace unos días. No es por echar culpa, pero eras la única que producía tal cosa, entonces no me sorprende tanto. 
  Las gotas caen con violencia y yo ya no sé qué hacer para dejar de pensar en que vuelvas otra vez. E intento acordarme de todas las cosas malas que me dejaste, y no sé qué extraño de vos, si sólo supiste lastimarme. Y no puedo acordarme ni de un solo momento en donde hayamos sido felices, ni por un segundo.
  Entonces me enojo, porque afuera sigue lloviendo, hace no sé cuántos domingos estaba con vos y cada fecha me recuerda que te fuiste hace rato.
Share
Tweet
Pin
Share
No comentarios
  Y pasa, pero no sabés muy bien cómo pasa. 
  Y pasás por al lado mío, y desvío la mirada hacia otro lado, ojalá no te des cuenta de que podría estar ahí mirándote todo el tiempo. 
  Y me mirás de vez en cuando y me gustaría poder decirte que yo te miro un poco más que a cada rato.  
  Y de repente estás riendo y pienso que tenés una de las sonrisas más lindas que vi en mi vida. 
  Y de la nada estás al lado mío, y un poco tiemblo y otro poco me da igual, son segundos que no se igualan a nada que recuerde antes.
  Y de vez en cuando te reís incluyendo sonido y yo agacho la cabeza para esconderte que te estoy mirando mientras sos feliz por un ratito. 
  Y más de una vez te veo observando para acá y te miro descaradamente, porque pienso que quizás así podés darte cuenta de que me traés muy mal.
  Y lo analizo todo el tiempo, pero al final siempre termino acordándome de tu sonrisita boba y me pongo a temblar.
  
Share
Tweet
Pin
Share
No comentarios
Newer Posts
Older Posts

About me

About Me

Aenean sollicitudin, lorem quis bibendum auctor, nisi elit conseat ipsum, nec sagittis sem nibh id elit. Duis sed odio sit amei.

Follow Us

  • facebook
  • twitter
  • instagram
  • Google+
  • pinterest
  • youtube

recent posts

Sponsor

Facebook

Blog Archive

  • enero 2023 (1)
  • agosto 2022 (1)
  • julio 2022 (1)
  • abril 2022 (1)
  • marzo 2022 (1)
  • agosto 2021 (1)
  • mayo 2021 (1)
  • abril 2021 (1)
  • febrero 2021 (1)
  • enero 2021 (2)
  • diciembre 2020 (2)
  • octubre 2020 (1)
  • septiembre 2020 (1)
  • agosto 2020 (2)
  • julio 2020 (1)
  • mayo 2020 (2)
  • febrero 2020 (1)
  • enero 2020 (1)
  • diciembre 2019 (2)
  • octubre 2019 (2)
  • septiembre 2019 (2)
  • agosto 2019 (1)
  • julio 2019 (1)
  • mayo 2019 (1)
  • abril 2019 (2)
  • febrero 2019 (2)
  • enero 2019 (2)
  • diciembre 2018 (3)
  • noviembre 2018 (4)
  • octubre 2018 (5)
  • septiembre 2018 (5)
  • agosto 2018 (8)
  • julio 2018 (8)
  • junio 2018 (8)
  • mayo 2018 (7)
  • abril 2018 (7)
  • marzo 2018 (5)
  • febrero 2018 (4)
  • enero 2018 (2)
  • diciembre 2017 (4)
  • noviembre 2017 (3)
  • octubre 2017 (8)
  • septiembre 2017 (7)
  • agosto 2017 (5)
  • julio 2017 (2)
  • junio 2017 (2)
  • mayo 2017 (2)
  • abril 2017 (1)
  • marzo 2017 (1)
  • febrero 2017 (4)
  • enero 2017 (2)
  • diciembre 2016 (6)
  • noviembre 2016 (9)
  • octubre 2016 (6)
  • septiembre 2016 (11)
  • agosto 2016 (6)
  • julio 2016 (10)
  • junio 2016 (4)
  • mayo 2016 (4)
  • abril 2016 (10)
  • marzo 2016 (4)
  • febrero 2016 (3)

Created with by ThemeXpose | Distributed by Blogger Templates